Si a los que alguna vez habéis leído mi Blogguer os deseo Feliz Navidad y Próspero Año 2011, por supuesto a los que me leeréis alguna vez también, si tenéis oportunidad sumar 2+0+1+1 os dará 4 y eso quiere decir que serán 4 trimestres llenos de alegría, prosperidad, salud y amor, no dejéis de aprovecharlos desde cuando suene la última campanada del reloj del día 31 de diciembre de 2010.
Ahora con esto de las nuevas tecnologías es muy fácil felicitar: pues te permiten remitir fotos, muchos recuerdos en palabras, grabarte en una webcam, mandarlo a YouTube, etc..., pero me acuerdo ahora hace 10 años cuando tenías que ponerte en contacto con tu familia para felicitar las navidades y el año nuevo era bastante complicado.
Aunque lo anterior sea muy bueno, no quiero olvidarme de las Navidades de mi infancia junto a mi familia, pues todo era un acontecimiento como me imagino en las casas de toda/os, lo primero que teníamos en mente era como realizar el Nacimiento pues era una tradición en nuestra casa el hacerlo diferente todos los años.
Participábamos toda/os, pues ya sabéis en las familias numerosas, están los que se les da bien el diseño, la pintura, etc... por supuesto, a los más pequeños junto a sus amiga/os nos tocaba ir a buscar cosas: papel, pinturas, musgo, etc.. pero todo era felicidad y amistad.
Nuestro clima nos ayudaba mucho pues poníamos semillas de maíz y frijoles, las cuales el 25 de diciembre ya tenían plantita y era precioso ver aquella siembra donde estaban el resto de figuritas del Nacimiento.
Todo el vecindario estaba pendiente que tenían pensado hacer la/os "del triángulo" era así como nos llamaban, porque una vez realizado lo poníamos para que todo el que quisiera lo pasara a ver y porque además les dabamos las gracias con tamales, chocolate o alguna otra cosita.
Nuestra Madre (+) se ponía a rezar a las doce y cinco de la noche, delante del Niño Jesús y nos hacía encender a cada hija/o una candela "roja" y nos decía: para que tuviéramos buena suerte todo el año.
Luego los 31 de diciembre, era una alegría, pues a las 12 de la noche empezaban a sonar las "buscaniguas" eran unos cohetes muy bulliciosos, pero es que les llamaban así porque buscaban el darnos "muchos sustos", pero lo más bonito era el ir donde los vecinos a felicitarles el nuevo año, diciendo Feliz Año Nuevo, darles un abrazo y oir a lo lejos la bonita canción: Faltan cinco pa las doce, el año va a terminar, me voy corriendo a mi casa a abrazar a mi mamá........
Ahora formas parte de tu propia familia, la que has creado, nuestros hijos de pequeñitos participaban en este acontecimiento, como es natural, pero ya son mayores, ya forman otras familias y así es el ciclo de la vida del ser humano, "pero no hay que olvidar lo que viviste y si fue algo feliz, mucho mejor"